Hoy ha sido un día lleno de emociones. Después de tantos años por fin tengo la suerte de ser el propietario de un Porsche. Mi agradecimiento al compañero Agavip que lo ha hecho posible y a aquel hombre poseedor de un maravilloso Súper Carrera verde que de niño me dejaba montar y arrancarlo. “Algún día tú también tendrás uno de éstos” me decía siempre... Te lo dedico viejo. Tú tuviste la culpa de mi amor por la gasolina. Estés donde estés seguro que lo estarás celebrando por todo lo alto.
Turbo del año 2.010, con 500 cv y todos los extras que llevaba el modelo más los asientos deportivos, la TV, el techo, las llantas de 21”, bola y muchas más cosas que iré descubriendo poco a poco. Fotos, según vayan saliendo, por ahora conducir, conducir y conducir.